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SESIONES DE CONTACTO TELEPÁTICO

CELEBRADAS EN 2001

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(se incluyen solamente las que no están en El Cielo responde)

 

 SESIÓN DEL 31/8/01

 

Médium: Jorge R. Olguín

Interlocutor: Horacio Velmont

Entidad que se presentó a dialogar:  Ron Hubbard (fundador de Dianética y Cienciología) y Tar, extraterrestre de Orión 4.

 

Interlocutor: ¿Quién está presente?

Ron: Hola, soy Ron…

Interlocutor: ¿Cómo le va Maestro… Tengo una serie de preguntas para hacerle…

Ron: Pues hagamos un ping pong de preguntas y respuestas.

Interlocutor: De acuerdo… ¿Qué es eso de la “mente impulsiva” de la que habla este receptáculo? ¿Qué diferencia hay con la mente reactiva?

 Ron: Como tú ya sabes, la mente reactiva actúa justamente cuando la mente analítica está muy disminuida, y así como yo, estando encarnado, detecté la mente reactiva original, que es la mente reactiva automática, Johnakan detectó –no se puede decir que descubrió– la mente reactiva impulsiva.

Interlocutor: ¡Ah, mente reactiva impulsiva! Creo que voy entendiendo…

Ron: Como dice mi hermano Johnakan, esta mente viene de cuando los espíritus encarnaban en seres primitivos, donde directamente tenían que usar esa mente impulsiva para escapar de los mamíferos carnívoros, como el tigre Diente de sable y otros animales feroces. 

La mente impulsiva es reactiva, y por eso yo no la llamaría sólo “mente impulsiva”, sin ningún agregado más… Yo dividiría a la mente reactiva en dos: mente reactiva automática y mente reactiva impulsiva, algo que ya adelantó este receptáculo conversando contigo.

Interlocutor: Me pregunto cómo puede actuar la mente reactiva impulsiva, es decir, huir de un tigre Dientes de sable, sin tener previamente archivada esa experiencia, o alguna que se le parezcan en el Banco reactivo…

Ron: La mente reactiva impulsiva reacciona sin pasar por experiencias previas. Fíjate, por ejemplo, que hay criaturas recién encarnadas que tienen apenas quizás dos años de vida biológica y ya le tienen miedo a la oscuridad. 

Interlocutor: Es cierto, lo he podido comprobar personalmente con mi nieto. ¿A qué se debe ese temor?

Ron: Son instintos innatos. Ese temor a lo desconocido se va disolviendo, a medida que se crece, con la mente analítica. Y lo mismo sucede con el miedo a los ruidos o a los insectos.

No deja de ser una mente reactiva, porque no hay un análisis de esos miedos.

Interlocutor: Es algo inherente a los seres humanos, entonces.

Ron: Así es, es algo inherente, pero que puede ser perfectamente doblegado por la mente analítica. No deja de ser un rol del ego. Reconozco que aprendí mucho con la enseñanza de Johnakan, a pesar de estar en el mismo nivel espiritual.

Digamos como que no es mi compañero sino mi Maestro. Es decir, Johnakan, en este último período, que ustedes llaman un año, ha intercambiado debates con el Maestro Jesús y le ha hecho ver la validez de algunas cosas en las que Jesús no estaba de acuerdo.

Interlocutor: ¿En los planos espirituales se compite como en el plano físico para ver quién tiene razón?

Ron: No, en los planos espirituales no se compite, sino que se debate a fin de obtener mayor Luz para todos y de este modo Servir mejor. Lo fundamental es el Servicio, no ver quien gana en un debate.

Lo que quise hacer notar es lo elevado que está Johnakan al debatir nada menos que con el Maestro Jesús y hacerle ver la legitimidad del punto de vista que sostenía.

Interlocutor: Entendí perfectamente… Ahora bien, ¿qué sucede cuando la persona está 100 % analítica? Me refiero a qué sucede con la mente reactiva impulsiva, es decir si funciona igual aunque no haya disminución de la capacidad mental, disminución que tiene que existir para que funcione la mente reactiva automática.

Ron: El mecanismo de la mente reactiva impulsiva es similar al de la mente reactiva automática, y para su funcionamiento es necesario que haya reducción analítica. Si la mente analítica no está reducida la mente impulsiva no funciona.

Interlocutor: ¿Todos los impulsos parten de la mente reactiva impulsiva?

Ron: No, todos no, pues puede haber impulsos afectivos que podrían ser llamados sensaciones afectivas, sensaciones de éxtasis… Pero estas reacciones yo no las tomaría como provocadas por mente reactiva impulsiva.

De repente yo, encarnado, cuando vi armado mi barco, tuve un golpe de éxtasis y llegué a tener mi pulsación cardiaca a más de 110 por minuto. Pero yo no puedo llamar a esto mente reactiva impulsiva. Era un impulso de éxtasis porque veía mi barco armado, que para mí era algo muy importante… Yo quería muchísimo a mi barco.

Interlocutor: Está claro el punto, Maestro.

Ron: Entonces, cuando uno está analítico a pleno, la mente reactiva impulsiva no funciona. Sí funcionan los impulsos de éxtasis, de amor, de entusiasmo, de cariño…

Interlocutor: A ver si he entendido su explicación: la mente reactiva automática funciona a través de engramas adquiridos previamente, entendiendo por engramas experiencias o incidentes desagradables que se han archivado en el Banco reactivo a través del dolor, sea físico o emocional, y la mente…

Ron: … Y la mente reactiva impulsiva reacciona sin engramas ante impulsos. Los impulsos son por ego. O sea que puede haber reacción por dramatización de engramas y puede haber reacción por rol de ego.

Así como el engrama es el fruto de la mente reactiva, el ego también es un fruto de la mente reactiva, que a su vez, mediante un principio de acción y reacción, hace interactuar al impulso. El impulso es un rol del ego. Y no necesariamente la persona tiene que tener un engrama.

El engrama yo más bien lo relaciono con la mente reactiva automática, cuyo mecanismo descubrí cuando estaba encarnado.

Pero la otra mente reactiva, la mente impulsiva, es tan dañina como la mente reactiva automática o más, porque la mente reactiva automática puede salvarte la vida… De repente, si tú escuchas una bocina saltas hacia atrás. Pero la mente reactiva impulsiva puede dañar a otros. Mejor dicho, directamente daña a otros.

Interlocutor: ¿Cuando el ego está integrado ninguna de estas dos mentes reactivas funciona?

Ron: Así es, porque no hay ego ni engramas. Pero hay una cosa que quiero dejar bien en claro. Es muy difícil que los espíritus de Luz que están encarnados integren el 100 % de su ego.

Supongamos que mi receptáculo tiene un 5 % de ego, entonces es muy fácil para él manejarlo, porque aunque en algún momento sea perturbado, a los pocos instantes se recuperará y va a vencerlo.

Pero un espíritu que está agobiado y que tiene un 90 % de ego, ese ego lo posee, y por lo tanto es muy difícil que ese ego pueda ser manejado por el espíritu, porque va a ser, en vuestro plano físico, como un caballo encabritado imposible de domar.

Interlocutor: Eso está claro… Pero me pregunto cómo hace la persona para pegar un salto cuando suena una bocina si ella está en un nivel alto de entusiasmo, es decir, con la mente analítica funcionando a pleno, y por lo tanto tiene desconectada la mente reactiva, sea impulsiva o automática…

Ron: Porque siempre hay algo así como un “relay”…

Interlocutor: ¿Un automático?

Ron: Si, como el que tienen los refrigeradores.

Interlocutor: Entiendo.

Ron: Bueno, siempre en la mente hay un automático que está pronto a disparar. Entonces, no importa que la mente analítica esté a pleno porque ese “relay” siempre va a estar vigilante y listo para reaccionar

Interlocutor: ¿Es decir, concretamente, que aunque la persona esté en completo entusiasmo, en el grado más alto de la escala tonal, completamente analítica, el mecanismo de defensa siempre va a estar alerta?

Ron: Así es. Recuerda que la mente reactiva es solamente un mecanismo de supervivencia que sirve para suplir a la mente analítica cuando está disminuida. Si la persona pudiera estar siempre analítica no necesitaría de ningún mecanismo de supervivencia. Hay que tener en cuenta que al comienzo de los tiempos la mente reactiva impulsiva fue un mecanismo de defensa.

Interlocutor: Creo que todo esto está muy claro… Pasando a otro tema, ¿desde el plano espiritual ustedes pueden ver a la mente humana?

Ron: La podemos percibir, no ver, porque en los planos espirituales no se ve ni se oye. Esa percepción es superior a vuestra vista, porque no solamente se perciben conceptos sino también estados de ánimo. Se perciben sensaciones, se perciben gustos, se perciben sonidos…

Interlocutor: ¿Y cómo nos perciben a nosotros? Me refiero a nuestra materia física.

Ron: Densos, muy densos. Por eso, cuando yo percibo un supuesto maestro que dice: “Yo soy sutil”, no puedo menos que reírme, conceptualmente se entiende, ya que no tenemos cuerdas vocales… Sería lo mismo que un pez saltara del agua y le dijera al humano: “Mira, yo también estoy en el aire”. El humano se reiría, y le respondería: “Tú estás cuatro segundos en el aire y nosotros estamos todo el tiempo”.

Interlocutor: Está clarísima la idea…

Ron: Los voy a dejar porque el hermano Tar quiere comunicarse con ustedes.

Interlocutor: Está bien, Maestro, hasta luego y gracias…

Tar: Queridos hermanos, aquí estoy nuevamente con ustedes…

 Interlocutor: En los pocos minutos que quedan de la sesión quisiera preguntarle sobre las razones por las cuales un espíritu encarnado se suicida. Específicamente me refiero al suicidio del doctor René Favaloro, un renombrado cardiólogo que operó del corazón a muchísimas celebridades. Su suicidio causó una tremenda consternación y se consideró que había sido por la situación económica en que estaba su clínica, donde todos saben que atendía a muchas personas en forma gratuita. Pero yo sospecho otros motivos…

Tar: En principio, les quiero informar que el hecho de que haya atentado contra su propia vida física, haciéndolo desencarnar, lo ha hecho bajar al plano del Error 3.

Interlocutor: ¿Cuál fue el motivo que lo impulsó a suicidarse?

Tar: Fue un problema de naturaleza engrámico…

Interlocutor: ¿El problema de fondo puede haber sido la muerte de su esposa que lo abatió porque la quería mucho?

Tar: Sin ninguna duda la muerte de su esposa biológica fue el mayor detonante, aunado a su deteriorada situación económica, y otros incidentes que sería largo de detallar que lo condujeron a una profunda depresión de la que pretendió huir quitándose la vida.

Interlocutor: ¿Su suicidio puede justificarse de alguna manera?

Tar: Nunca se justifica el quitarse la vida.

Interlocutor: Mi pregunta se debió a que yo conozco en carne propia lo que es un estado depresivo, del cual uno busca salir de cualquier forma que sea.

Tar: El suicidio no deja de ser ego, no deja de ser egoísmo. Ese médico en ese momento sólo pensó en él… Es un tema para debatir, porque muchos encarnados no pensarán lo mismo, quizás diciendo que “tú dices eso porque no estás en el lugar de la persona”.

¡Si esas personas supieran lo que se sufre en la Octava Esfera, ese lugar tan particular donde no sólo se padece el dolor de uno sino también el dolor de todos los demás espíritus…!

Imagínate un dolor de muelas, que en el plano físico es muy cruento, multiplicado por un millón de veces...

El dolor en la Octava Esfera no se puede eliminar con calmantes, como en el plano físico, ni tampoco existe como última defensa el recurso del desmayo. El dolor no tiene pausa, es algo constante.

Entonces, ese espíritu, en el plano -2, así es llamada también la Octava Esfera, está sintiendo el dolor de todos los miles y miles de espíritus que están allí, y del cual logra salir solamente cuando empieza a preocuparse en lugar de por su dolor por el dolor del otro. Esa milésima de segundo en que deja de pensar en sí mismo para pensar en el otro lo eleva automáticamente de plano.

Entonces, y esto no lo expreso con ánimo de crítica, aquellos que creen saber mucho no se dan cuenta de que ese dolor extremo que sentía este espíritu querido, que encarnó como René Favaloro, no sufría ni la millonésima parte de lo que sufre un espíritu en la Octava Esfera…

Interlocutor: Creo que esta cuestión está aclarada… El doctor Favaloro, para cursar su carrera de médico y de cirujano tuvo necesariamente que sacrificar a muchos animales… ¿Cómo influyó esto al desencarnar?

Tar: Ésa es una de las razones por las cuales ese espíritu ha descendido al plano 3. Es decir, dejó de ser un espíritu Maestro por la tremenda desaprensión que tenía por otros seres vivos, a los cuales no respetaba.

Yo, como espíritu de Luz, no creo que los espíritus de los distintos animales en los distintos planetas sean espíritus “inferiores”, sino espíritus con menos discernimiento, pero que igual merecen el mismo respeto. Así es como piensa un espíritu de Luz.

No son seres inferiores, reitero, sino con menos discernimiento pero con el mismo amor. Aunque no todos, porque hay seres inferiores a los que los domina su estómago y por más amor que tengan “te comen”.

Interlocutor: Dejando este tema y en los últimos segundo de sesión quiero hacerle una pregunta personal: ¿Están los espíritus del error y los “demonios” tratando de entorpecer mi misión?

Tar: La respuesta es que sí. Y tienen dos maneras para hacerlo: una, tomando a la persona más débil espiritualmente, en este caso tu pareja biológica del plano terrestre. Y de alguna manera tratan de influenciarla en tu contra a través de su Cuerpo deseos o emocional.

Como lo dijimos muchas veces, el Cuerpo de deseos de la persona encarnada no tiene nada que ver con deseos físicos, sino con ideas negativas.

Y la segunda forma es haciendo foco. Los espíritus pueden hacer telekinesis, aunque en muy pequeña escala y pueden llegar a entorpecer hasta un aparato electrónico.

Interlocutor: ¿Usted se refiere, concretamente, a mi computadora que a veces tiene problemas inexplicables?

Tar: En particular a tu computadora… Voy a dejarlos porque el receptáculo está muy desestabilizado… Los dejo con toda mi Luz.

Interlocutor: Hasta luego, Tar, y gracias.

 

 FIN DE CONTACTOS TELEPÁTICOS 2001

 
 
 
 
 

 
 

 
         
         
       
       
       
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