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Frases para recordar

El alma del hombre es como el agua. Viene del cielo,
se eleva hacia el cielo
y vuelve después a la tierra,
en un eterno ciclo.
GOETHE

 

Sabed, por tanto, que del silencio más in¬menso regresaré. [...] No
olvidéis que vol¬veré junto a vosotros. [...] Unos momentos más, un
instante de reposo en el viento, y otra mujer me concebirá
KAHLIL GIBRAN


Siempre había tenido la sensación de que mi vida, tal como la viví era
una historia sin principio ni final. Me sentía como un fragmento
histórico, un pasaje aislado, al que no precede ni sigue ningún texto.
Po¬día imaginarme perfectamente que tal vez había vivido en siglos
anteriores y me ha¬bía hecho preguntas que todavía no era capaz de
responder; que tenía que volver a nacer porque no había cumplido la
tarea que se me había asignado.
CARL JUNG

¡Hace tanto tiempo! Y todavía sigo sien¬do la misma Margaret. Lo único
que envejecen son nuestras vidas. Donde estamos, los siglos sólo son
como segundos, y después de vivir mil vidas, nuestros ojos empiezan a
abrirse.
EUGENE O'NEILL

De modo que la idea de la reencarnación explica de forma muy
reconfortante la rea¬lidad, permitiendo con ello que el pensa¬miento
hindú venza aquellas dificultades que dejan paralizados a los
pensadores eu¬ropeos.
ALBERT SCHWEITZER


Y su dolor no remitía. Finalmente dio a luz a otro niño, y fue grande
la alegría del padre, que exclamaba: «¡Un varón!»

Aquel día sólo él sintió ese júbilo.
La madre, postrada y abatida, estaba pálida y exánime... Lanzó de
repente un grito de angustia, pensando en el ausente, no en el recién
nacido...
«¡ Yace mi niño en la tumba y no estoy a su lado!»
Oye de nuevo la amada voz del difunto en boca del bebé que ahora tiene
en sus brazos:
«Soy yo, ¡pero no lo digas!», susurra mirándola a los ojos.
VICTOR HUGO


Creo que cuando alguien muere
su alma regresa a la tierra,
engalanada con algún nuevo disfraz  humano;

otra madre le trae al mundo.
Con miembros más robustos y un cerebro más brillante
la vieja alma emprende de nuevo su camino.
JOHN MASEFIELD


¿Eres tú la misma doncella que otrora la detestable tierra abandonó,
oh, dime ,en verdad, y ha regresado una vez más a visitamos? ¿ O eres
esa joven de dulce sonrisa...?
¿ O algún miembro de la prole celestial venido en un trono de nubes
para hacer el bien al mundo? ¿ O perteneces a las huestes de doradas
alas, que ataviadas con ropaje humano descienden a la tierra desde su
asiento designado y tras una breve estancia alzan el vuelo y raudas
regresan para mostrar qué suerte de criaturas engendra el cielo, y de
ese modo inflamar el corazón de los hombres con el fin de que desdeñen
este mundo miserable y aspiren al cielo?
JOHN MILTON



El secreto del mundo es que todas las co¬sas subsisten y no mueren;
tan sólo se re¬tiran y desaparecen de nuestra vista para regresar más
tarde. Nada muere; los hom¬bres fingen estar muertos y tienen que
aguantar la parodia de sus funerales y afli¬gidas necrológicas, y ahí
están, de pie, mi¬rando por la ventana, sanos y salvos, con un nuevo y
extraño disfraz.
RALPH W ALDO EMERSON
 

   

He estado antes aquí,
pero no sabría decir cuándo,
conozco la hierba que hay más allá de la [puerta,

el aroma sano y penetrante,
el rumor acompasado, las luces de la costa. Habías sido mía antes,
no puedo decir cuánto tiempo hace de ello; pero justo cuando te giraste
para ver volar la golondrina,
un velo cayó y lo supe todo de los tiempos [pasados.
DANTE GABRIEL ROSSETTI


El hombre vive y muere muchas veces entre sus dos eternidades,
la de la estirpe y la del alma,
y la vieja Irlanda lo sabía.
Muera el hombre en su lecho
o bien caiga por arma de fuego,
una breve separación de los suyos
es lo único que debe temer.
Aunque es larga la tarea de los sepultureros, sus palas son
resistentes y sus músculos
fuertes. No hacen sino devolver a los que entierran a la mente de los hombres.
W. B. YEATS


Nuestro nacimiento es un sueno y un olvido;
el alma que amanece con nosotros, nuestra estrella,
tuvo su lugar en otra parte,
y viene de muy lejos,
aunque no en un olvido absoluto
ni en completa desnudez,
pues llegamos arrastrando nubes de gloria desde Dios, nuestra morada.
El cielo nos rodea en nuestra infancia.
WILLIAM WORDSWORTH

Mi doctrina es: Vive de tal modo que lle¬gues a desear vivir otra vez,
éste es tu de¬ber, ¡porque revivirás de todas formas!
NIETZSCHE

Sé que soy inmortal. No hay duda de que he muerto unas diez mil veces
en el pa¬sado. M e río de lo que llamáis extinción y conozco la
amplitud del tiempo.
WALT WHITMAN


Una prueba fehaciente de que los hom¬bres conocen la mayoría de las
cosas antes de nacer es el hecho de que cuando son sim¬ples niños
llegan a entender innumerables fenómenos con tal rapidez que es
evidente que no los están comprendiendo por prime¬ra vez, sino que los
recuerdan, los traen a la memoria...
CICERÓN


Pues hemos llegado a este lugar por dife¬rentes caminos. No tengo la
sensación de que nos hayamos conocido antes, de déja Vú. No creo que
fueras tú, vestida de azul lavanda, quien estaba a orillas del mar,
cuando yo pasaba cabalgando en el año 1206, o a mi lado en las guerras
fronterizas, o allá  en las Gallatin, hace cien años, tumbada junto a
mí en la hierba de un verde platea¬do, sobre un pueblo de montaña. Lo
sé por la naturalidad con la que vistes ropa lujosa y por cómo mueves
la boca cuando te diri¬ges al camarero en los buenos restaurantes. Tú
provienes de los castillos Y' de las cate¬drales, de la elegancia y
del imperio.
ROBERT JAMES WALLER

Qué interesante sería escribir la historia de las experiencias en esta
vida de un hom¬bre que se suicidó en su vida anterior; cómo tropieza
ahora con las mismas exigencias que se le habían presentado
anteriormente, hasta que llega a comprender que debe sa¬tisfacerlas...
Los hechos de una vida previa encauzan la vida presente.
TOLSTÓI

Tú que eres joven y te crees olvidado de los dioses, sabe que si te
vuelves peor te reunirás con las almas inferiores, y que si te haces
mejor te reunirás con las superiores, y que en la sucesión de vidas y
muertes te to¬cará padecer lo que te corresponda a manos de tus
iguales. Esta es la justicia del cielo.
PLATÓN


Como creo en la teoría del renacimiento, vivo con la esperanza de que,
si no en esta vida, en alguna otra podré abrazar con amor a toda la
humanidad.
MOHANDAS K. GANDHI

Apercibiéndome de que existo en este mundo, estoy convencido de que,
en una forma u otra, existiré siempre; y a pesar de todos los
inconvenientes que conlleva la vi¬da humana, no pondré reparos a una
nue¬va edición de la mía, esperando, sin embar¬go, que las erratas de
la última puedan ser corregidas.

BENJAMIN FRANKLIN

 

 
 
 
 

 
 

 
         
         
       
       
       
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